Desde que estudiaba en el Instituto Tecnológico de Manizales, Daniel se destacaba como un excelente estudiante y después de graduarse como mejor bachiller la vida parecía tenerle un buen presagio académico que se hizo realidad al integrar el grupo de Orgullo UN, estudiantes que por su promedio sobresalen en la UN.
Este joven quien cursa IV semestre de Ingeniería Electrónica, tiene promedio Académico Ponderado Acumulado (PAPA) de 4.6, el cual ha obtenido gracias a la dedicación y a la disciplina que lo han caracterizado, “soy responsable, honrado y honesto, todo lo que me han inculcado mis padres”, aunque también su perfil de estratega innato le ha ayudado a conseguir muchos logros en su vida.
Además de su carrera, Daniel es un aficionado a los videojuegos, pero no solo es una diversión, en este mundo virtual cultiva su pasión por la estrategia, lo que le exige retos continuos para avanzar al siguiente nivel.
“Me gustan los juegos de estrategia en tiempo real, básicamente lo que tienes que hacer es planear un método para poder llegar al objetivo del juego y durante el se van presentado obstáculos que tienes que ir sorteando, eso implica estar planeando y reinventando de nuevo la estrategia que es lo que más me motiva”, comenta Daniel.
Pero no solo la virtualidad es el escenario para que este joven apasionado por el análisis y la planificación muestre sus dotes de estratega, también la práctica del fútbol le permite demostrar que en esta materia él se desenvuelve como todo un experto.
“Me gusta ser volante creativo, me parece chévere estar organizando los pases y planeando el juego. Soy hincha del Once Caldas, disfruto ver a la selección y practicar este deporte poniéndole mucha inteligencia”, explica Daniel.
Y en lo relativo a su carrera Daniel con su perfil de estratega ha desarrollado ciertas claves para mantener su promedio de 4,6, asimismo ser motivo de felicidad para sus padres y estudiante Orgullo UN.
“Lo más simple es sacar muy buenas notas iniciando el semestre porque después va ser más duro, mi método es prepararme al principio lo más fuerte posible y ya en las últimas semanas del semestre es más sencillo sostener un buen rendimiento sin tanta tensión”.
Pero aunque haya momentos de estrés su carrera es todo un hobby, desde muy pequeño le gustó el mundo de la electrónica, desbaratar los aparatos aunque no supiera cómo organizarlos después, esa siempre fue su afición.
“Me encantaba ver en las noticias cuando hablaban de robots y tecnología para inventar cosas nuevas, desde la infancia siempre tuve en mente que quería estudiar algo afín con estos temas y a pesar de que tuve la oportunidad de pasar a medicina, me decidí por la electrónica y tengo la fortuna de estudiar la carrera que amo”, concluye Daniel, y tal vez por eso su promedio PAPA de 4,6 más que fruto del esfuerzo es el resultado de las cosas hechas con amor.
Informes: Daniel Orozco Moya, IV semestre de Ingeniería Electrónica.
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