Manizales, Jul. 16 de 2013 - Agencia de Noticias UN- La tasa de motorización en Manizales es superior al 20%, un índice demasiado alto para una ciudad intermedia que debería registrar un aumento del número de vehículos del 3,5%.
Con base en trabajos de campo adelantados desde el año 2012 sobre los flujos vehiculares que se presentan en algunos sectores de la ciudad, se ha encontrado de forma preocupante que los volúmenes han aumentado a una tasa superior al 20% anual.
“El incremento se debe a una mezcla de muchas variables. Por ejemplo, las firmas de tratados de libre comercio han rebajado el precio de los vehículos y las motos; hay una disminución de los controles para expedir las licencias de conducción; existe deficiencia en el sistema de transporte público colectivo, por lo que la gente prefiere comprar una moto para movilizarse”, detalla Diego Escobar García, director del programa de Ingeniería Civil de la UN en Manizales.
“El número de vehículos que circula en Manizales se ha desbordado. Hay que encender las alarmas porque son valores demasiado altos comparados con los de otras ciudades. Bucaramanga reportaba una tasa de crecimiento del 12,6% anual y Pereira, el año pasado, llegó a una del 9%, valores que son ya muy altos, pues la normal para una ciudad intermedia está entre el 3% y el 3,5%,”, precisa el profesor Escobar García.
Manizales no posee una infraestructura de transporte que soporte tasas de crecimiento tan altas. Si la ciudad quiere sostener este índice de forma continua, que según Escobar García no es lo deseable, se tendrían que construir vías de una envergadura muy amplia.
Al respecto, plantea que la ciudad tiene que llegar a ser sostenible, pero primero debe hacer estudios de movilidad con bases de datos más firmes y actualizadas.
“Si la decisión es que Manizales soporte estas tasas de crecimiento, no habría otra solución que llenarla de vías. Pero todas las calles que se le entreguen al vehículo privado van a colapsar, pues el flujo de vehículos es como el agua: por cualquier fisura se introduce”, advierte el investigador de la UN.
Una mejor opción es darle mayor funcionalidad a la red vial existente, porque no todas las vías son para transporte público y privado: deben tener un uso equitativo entre los diferentes modos de movilización.
Asimismo, es necesario fomentar el uso del transporte público mediante estrategias para captar usuarios de vehículos privados o incentivar a las personas para que usen la bicicleta o caminen.
(Por:Fin/AMEJ/CAPG/fgd)