Manizales, nov. 06 de 2013 - Agencia de Noticias UN- Mediante un modelo de gestión que genere impactos positivos para sus servicios, clientes y funcionarios, se busca que el poder transformador de la tecnología se incorpore a las organizaciones del país.

La gestión de sistemas de información se ha convertido en un aspecto esencial en las organizaciones, al ser un valor agregado para la prestación de un mejor servicio.

Durante su visita a la Universidad Nacional de Colombia en Manizales, Javier Torres Páez, asesor del Ministerio de Comunicaciones y Tecnologías de la Información, aseguró que se busca plantear un cambio de paradigma en la gestión de tecnología del sector público, mediante la adopción de modelos de gestión estratégica de la información, para que las instituciones vean las TIC como un gran habilitador que los lleve a crecer y desarrollarse tanto al interior como al exterior.

Bajo este enfoque, el papel de la tecnología puede ser un factor diferenciador para la competitividad, pero se requiere un modelo que permita que las organizaciones mejoren sus flujos de información. Esto repercute en sus servicios, en la calidad de vida de los ciudadanos, en la reducción de costos, en los trámites e, incluso, forja bienestar en los mismos funcionarios, accionistas y gerentes.

Dicho modelo de gestión consta de seis grandes dominios en las organizaciones: estrategia de tecnología, esquema de gobierno para generar políticas, oferta de información y servicios en línea hacia todos los públicos, desarrollo de soluciones, excelente administración de tecnología como un servicio y, finalmente, gestión para el uso y apropiación por parte de todos usuarios.

“Estos enfoques requieren, además de una oferta amplia de servicios en línea y en tiempo real, un equipo humano especializado muy bien liderado, pero sobre todo conectado con las verdaderas preocupaciones del negocio. No solo se trata de administración técnica sino de que los líderes de tecnología se conviertan en agentes de cambio”, señaló el asesor del MinTic.

En este sentido, hay múltiples oportunidades, pero es necesario adecuar la gestión de las TIC a la realidad de cada de organización y, sobre todo, a sus fines estratégicos.

No es lo mismo un área de tecnología del sector privado a una empresa de la banca, del sector salud o de defensa. La gestión de estas tecnologías tiene que adecuarse e, incluso, ser capaz de darle forma a esa realidad, así como una personalidad a la institución.

“Queremos que la tecnología deje de verse en un sentido instrumental (como aparatos que se deben adquirir para estar actualizados), y pase a ser entendida en un valor mucho más profundo, en su capacidad de transformación de la calidad de vida para el cliente interno y externo, en el impacto de los objetivos finales de crecimiento, rentabilidad y servicio organizacional”, precisó Torres Páez.

(Por:Fin/AMEJ/CAPG/AC)