Manizales, ago. 04 de 2014 - Agencia de Noticias UN- La Red de Estaciones Hidrometeorológicas de la U.N. Sede Manizales reportó hoy, por primera vez, un registro acumulado de 0 milímetros de lluvia en 25 días continuos.

Para que un registro de lluvia sea considerable deben caer por lo menos 10 milímetros en adelante y de manera constante. Así lo explica Jhon Alexander Pachón, investigador del Instituto de Estudios Ambientales (IDEA).

Según el experto, esta zona obtiene un promedio de 1.900 a 2.000 milímetros de aguas lluvias al año. Es un municipio recurrente en precipitaciones, pero no por eso es el de más cantidad.

“En términos de tiempo, lo máximo han sido 25 días sin llover desde noviembre de 2006, lo cual no se había dado antes porque siempre se tenía el mínimo correspondiente a 2,2 milímetros de agua”, añade.

El mes de julio ha sido el más seco hasta ahora, según datos de temperatura del registro histórico con 30,5 grados centígrados, situación que se presenta a nivel mundial desde junio.

De hecho, la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA) declaró que junio de 2014 fue el más caluroso de lo que se tiene registro desde 1880, lo cual es evidencia de una transición caracterizada por olas de calor fuertes.

Colombia no ha sido la excepción. A pesar de que el fenómeno de El Niño no ha llegado a su máxima expresión, la producción y cultivo de alimentos se ha visto afectada, al igual que las implicaciones sociales que acarrea.

“Existen indicios bastante prolongados de un fenómeno que se caracteriza por un incremento de las temperaturas superficiales del Océano Pacífico, lo que redunda en menor cantidad de precipitaciones”, aclara el ingeniero Pachón.

Para medir la precipitación, se ubican sensores de un metro cuadrado llamados pluviómetros, que sirven para captar la cantidad de lluvia en milímetros. Cada milímetro equivale a un litro de agua por metro cuadrado.

El impacto que tiene la lluvia sobre el terreno es diferente al ser prolongada o intempestiva. “Las lluvias que han caído han sido muy tenues, pues los pluviómetros han captado entre uno y dos milímetros”, añade.

Aunque normalmente julio es el mes más seco del año, con El Niño empiezan a disminuir los valores. Por eso, el experto destaca que habría que mirar cómo es la dinámica en agosto, un mes semiseco.

“Si a eso le añadimos efectos macroclimáticos que empiezan a incidir en el territorio, vamos a ver una reducción mucho más fuerte y, de acentuarse El Niño, tendría sus máximos entre noviembre y finales de año”, declara.

La indicación de Pachón y principales entidades ambientales es hacer un uso racional del agua.

“Paradójicamente, en Manizales hace tres años tuvimos emergencia de agua por el fenómeno de La Niña, en el que nos vimos afectados al dañarse la planta de tratamiento por exceso de agua. Ahora tenemos que racionar el preciado líquido para que no se empiece a recortar”, comenta el ingeniero.

(Por:Fin/MLIA/dmh/AC)