MANIZALES, 20 de septiembre de 2015 — Agencia de Noticias UN- En los campus Palogrande y La Nubia fueron 2.230 los aspirantes que presentaron la prueba de admisión para optar a uno de los 635 cupos de pregrado que ofrecerá la Sede Manizales para el primer semestre de 2016.
En relación con la prueba anterior, el jefe de la Oficina de Registro y Matrícula de la Sede, John Jairo Vásquez Largo, señaló que se incrementó en un 3 % el número de aspirantes para esta ocasión; asimismo, dijo que se habilitaron 45 aulas y se contó con el apoyo de 73 docentes cuya labor es garantizar el buen funcionamiento y el desarrollo de las pruebas.
En el campus Palogrande se presentaron 774 aspirantes, para lo cual se contó con 19 aulas y 27 docentes; en el campus La Nubia los participantes fueron 1.456 jóvenes para quienes se dispusieron 26 aulas y se contó con el apoyo de 46 docentes.
“Los 2.230 bachilleres vienen, principalmente, de regiones del Eje Cafetero (Caldas, Quindío y Risaralda), sin embargo, siempre hemos contado con la participación de algunas personas procedentes de regiones cercanas, como el norte del Valle del Cauca”, indicó el jefe Vásquez Largo.
Este es el caso de Orlando Cardona, un joven que vino de Tuluá (Valle del Cauca) y que se presentó al pregrado en Ingeniería Electrónica para complementar un proceso de tecnología ya iniciado en su ciudad de origen.
“Escogí la Universidad Nacional como opción para mi carrera profesional porque es la mejor del país, además porque los semilleros de investigación son muy buenos y tengo excelentes referencias de la Institución”, agrega el solicitante a cupo tulueño.
Otro de los aspirantes fue Carlos Marino Muñoz Pinilla, quien también aspira a la carrera de Ingeniería Electrónica. Dado que el joven presenta una discapacidad auditiva, la U.N. le brindó el acompañamiento permanente de un profesor durante el desarrollo de la prueba, la oportunidad de realizarla en un aula diferente, y una hora más de tiempo para que la finalizara.
Por lo anterior, Juan Carlos Muñoz Echeverri, padre del menor, se mostró satisfecho por el hecho de que la Institución haya apoyado a su hijo en todo momento, pues para Carlos Marino su discapacidad auditiva no ha sido impedimento para salir adelante y buscar formarse en lo algo que lo apasiona.
“Siempre le ha gustado la electrónica, todo lo que tenga que ver con circuitos, computadores, robots y todas esas cosas; él es muy inteligente, sus profesores y compañeros lo han apoyado siempre en su meta de salir adelante”, señaló el emocionado progenitor.
Otro de los aspirantes fue Nicolás Correa Cruz, de Armenia, quien se presentó para la carrera de Arquitectura no sólo porque le gusta mucho sino también por la cercanía y comodidad que le representa la Sede Manizales, además, mencionó que ya ha realizado dos seminarios en la U.N. y le ha parecido que su nivel académico e institucional es excelente.
Las pruebas se desarrollaron en un lapso de tres horas y media sin contratiempos. Así mismo, se contó con la vigilancia del personal de apoyo de la Brigada de Emergencias y la de la Oficina de Registro y Matrícula.