Agencia de Noticias UN- En pendones a todo color, se presentan imágenes y textos sobre las experiencias vividas por jóvenes y mujeres desplazadas del Eje Cafetero, luego de salir del conflicto armado.

Estas piezas son exhibidas en la biblioteca del campus Palogrande de la Universidad Nacional Sede Manizales, tras convenio académico con la Universidad de Caldas, para hacer visible el proyecto que reunió a la población afectada por la guerra en esta región del país.

Así lo dio a conocer Juan Pablo Charry, gestor cultural de la biblioteca, quien señaló que, justamente la temática que aborda la exposición está relacionada con la paz, punto de referencia relacionado con la celebración del mes del idioma, en aras de humanizar el lenguaje con que se asume la problemática.

“La paz debe ser nuestro idioma es la consigna que estamos adelantando, y este Museo Itinerante, resultado de un trabajo de la Unicaldas, tiene conexión con esta temática que promovemos entre el estudiantado y toda aquella población que nos visita”, precisó el gestor Charry.

Los pendones, que tienen como base un mural pintado en el túnel de la calle 52, en Manizales (muestra a dos niños contemplando el horizonte), están acompañados de una serie de reflexiones de las víctimas que hicieron parte de un encuentro propiciado a través de la Red de Investigadores de Conflicto Armado del Eje Cafetero.

“Por haber estado en la guerrilla, ahora procuro que mis acciones sean por el bienestar del país, yo puedo y quiero hacer algo por la sociedad”, reza en uno de los ocho pendones exhibidos públicamente, que se centran también en consignas sobre la soledad, la migración, la memoria, el campo y la ciudad.

Al respecto, Juan Pablo Mejía, docente de la Unicaldas, comentó que en la ciudad se buscan espacios para visualizar este tipo de proyectos sociales que reflejan los sentimientos y pensamientos estos grupos de personas, que después de alejarse del conflicto viven otro proceso de adaptación, una especie de migración del campo a las ciudades. “En ese sentido, nos agrada que la U.N. se haya vinculado con esta exposición”.

El proyecto, materializado a través del Centro de Estudios sobre Conflicto, Violencia y Convivencia Social (Cedat) de la Universidad de Caldas, recoge los testimonios de una población que asume en sus vidas procesos nuevos de adaptación, la mayoría, lejos de sus municipios de origen.

En la capital caldense el tema de la paz comenzó a cobrar mayor fuerza con el surgimiento de nuevos espacios para hablar libremente. Un ejemplo de ello es el recién creado Consejo Municipal de Paz, programa liderado por la Alcaldía, con el que se busca articular los diferentes entes académicos, sociales, políticos y administrativos, con los grupos de víctimas de la región. La U.N. Sede Manizales se vinculó con la asesoría que brindó Alejo Vargas, director del Centro de Pensamiento y Seguimiento al Diálogo de Paz.