Agencia de Noticias UN- Con un pulidor electroquímico logran disminuir el tiempo dedicado a limar los aceros utilizados en recubrimientos de implantes médicos.

La novedosa propuesta se basa en una solución compuesta de ácido sulfúrico (o ácido fosfórico) y agua destilada a la que se le aplica un voltaje o corriente a través de una fuente de energía durante al menos cinco minutos.

El resultado, como afirmaron Fabián Silva y Jonathan Silva, estudiantes de Ingeniería Electrónica de la Universidad Nacional de Colombia Sede de Manizales, se nota cuando al sumergir y posteriormente sacar el acero tipo 304, el resulta un material muy bien pulido.

“Normalmente en el Laboratorio de Física del Plasma pueden tardar entre tres y cuatro horas puliendo los aceros con una lima. Nuestra propuesta pretende optimizar ese proceso y disminuir los tiempos”, indicó Fabián Silva.

Los inventores afirmaron que en el mercado existen modelos similares aplicados a pulir metales con los que fabrican las cadenas. Sin embargo, no hallaron uno relacionado con la ciencia o las investigaciones en mejora de la calidad de vida de pacientes que requieren implantes.

Por ello, su objetivo central es perfeccionar más la técnica, mejorar las cantidades químicas y el tiempo, con el ánimo de obtener un acero pulido tipo espejo que se adapte más a los diferentes procesos investigativos desarrollados en el laboratorio del Campus La Nubia de la U.N.

“Queremos ponerlo a punto, es decir, saber con exactitud la cantidad de concentraciones de químicos y su reacción con el tiempo. A eso nos dedicaremos este nuevo semestre”, anotaron los estudiantes.

Nuevos materiales

Actualmente y entre varios proyectos, en el Laboratorio de Física del Plasma se utilizan biomateriales metálicos limitados, principalmente aceros inoxidables, aleaciones a base de cobalto-cromo y titanio, debido a su resistencia mecánica que facilita la construcción de cabezas femorales en el reemplazo de caderas y rótulas, entre otras estructuras óseas.

Asimismo, otro acero como el 316l es popular quirúrgicamente por sus propiedades de resistencia a la corrosión, dureza mecánica y bajo contenido de carbono.

El laboratorio de Física del Plasma comenzó a funcionar en 1994 en el campus Palogrande, bajo la batuta del profesor Alfonso Devia Cubillos (q.e.p.d.), quien adelantó experimentos para crear nuevos materiales.

Posteriormente, en 2004, el laboratorio se trasladó a sus actuales instalaciones con una infraestructura que incentiva el trabajo docente y de investigación, con la asistencia de equipos especializados que facilitan los experimentos.

El equipo, del que hacen parte los estudiantes Silva, está conformado también por personal interdisciplinario de físicos, ingenieros y administradores, encaminados al desarrollo de las actividades de formación, extensión e investigación.

“En mediano plazo, esperamos contribuir con los procesos a través de una técnica más avanzada para pulir los aceros”, manifestaron los inventores, quienes socializaron su idea en la exposición de Gestión de Proyectos.