El estudio de viabilidad, que antecede a las obras de reforzamiento estructural del campus de la Universidad Nacional de Colombia (U.N.) Sede Manizales, empezaron a ejecutarse desde tres frentes.

El primer grupo adelanta la recopilación de documentación histórica, arquitectónica y cultural del emblemático edificio que sirve de sede desde 1969 al programa de Arquitectura y Urbanismo.

Otra línea está encargada de analizar los planos arquitectónicos y estructurales existentes, con el fin de reajustar los segundos, de forma milimétrica o con mayor precisión.

Asimismo, un tercer equipo humano está al frente de las pruebas de resistencia de una de las 75 cerchas en madera que sostienen la estructura para determinar con exactitud qué tanta carga puede asimilar.

“Esa cercha se somete a cargas horizontales y verticales, en el laboratorio de estructuras de la Universidad. El resultado nos dará el diseño ideal para reacondicionar el resto, que durante muchos años se han sometido a intervenciones en sus piezas, empalmes, tornillos, etc.”, precisó Juan Manuel Sarmiento, arquitecto restaurador que integra el equipo.

El profesor indicó que este estudio preliminar terminará el próximo 15 de diciembre con la presentación de un proyecto que comenzaría a ejecutarse en marzo de 2017.

“Esas serían las obras de reforzamiento estructural del edificio de madera, porque el resto, lo que tiene que ver con la estructura metálica, está en buen estado”, anotó Sarmiento.

En marzo pasado, el Ministerio de Cultura inspeccionó el campus para conocer la afectación que registra por la presencia de insectos conocidos como termas.

Más de un siglo

A través del Decreto 1543 de 1996, el Ministerio de Educación declaró la edificación como Monumento Nacional, mientras el Ministerio de Cultura lo enlistó entre los bienes de interés cultural (BIC) por sus valores representados en lo artístico, estético e histórico, que requieren un especial tratamiento en el marco del Régimen Especial de Protección o salvaguardia.

Por tanto, a través de la formulación de estudios y proyectos y en calidad de propietaria y tenedora del edificio, la U.N. busca salvaguardarlo.

Justamente, el MinCultura posee once tipos de intervenciones que incluyen los parámetros a los que deben ceñirse cuando se trata de un BIC. En el caso de El Cable será bajo la especialidad de reforzamiento estructural.

Para ello, se dispuso de un grupo de profesionales en cabeza del director del proyecto Néstor William García, los ingenieros civiles Jairo Andrés Paredes y Carlos Bermúdez; así como los arquitectos restauradores Juan Manuel Sarmiento y Pilar Sánchez, con el apoyo de egresados del programa de Arquitectura y Urbanismo.

El diseño y la construcción del edificio fueron realizados entre 1913 y 1922, luego fue donado por Ferrocarriles Nacionales a la Universidad Nacional de Colombia en marzo de 1977.