La Universidad Nacional de Colombia (U.N.) Sede Manizales es uno de los espacios académicos donde se realizan diversos debates sobre la consulta del próximo 2 de octubre, que pondrá a los colombianos frente a la aprobación o el rechazo del Acuerdo Final de Paz entre el Gobierno y las FARC.

Una de las actividades más recientes fue organizada por el Comité de Representantes de los Estudiantes y el Comité de Pro Paz U.N. Manizales. Además, contó con la participación del académico Jorge Hernán Arbeláez, investigador en temas de conflicto y el diputado Nicolás Aguilar, del Centro Democrático.
Durante su intervención, Arbeláez defendió la postura de ir a las urnas con la firme intención de aportar a la resolución de una guerra que ha dejado alrededor de ocho millones de víctimas.
Según el investigador, se trata de un momento histórico para el país y los ciudadanos, pues en sus manos está la decisión.
“El Gobierno tenía la opción de seguir en medio de una guerra tratando de derrotar a las FARC o, a través de un pacto, finalizar uno de los conflictos más extensos de Latinoamérica, incluso, del mundo. Si en El Salvador se logró acabar con uno similar, guardando las proporciones, entonces, ¿por qué en Colombia no?”, precisó.
Puntos clave como la reforma rural integral, que hace parte del Acuerdo Final, estipulado en un documento de 297 páginas, fue defendido por el docente, al resaltar la creación de un Fondo de Tierra con tres millones de hectáreas que serán entregadas a los campesinos que carecen de esta, además, de otras siete millones para los que sí la tienen, pero sin títulos de propiedad.
Asimismo, este tipo de negociaciones, para resolver un conflicto bélico de tantos años, no se hace acudiendo a la justicia ordinaria, sino transicional, tal como apeló el Gobierno, que implica penas alternativas que cuentan con el aval de la Corte Penal Internacional.
“Ello implica bridarles seguridad para que no pase lo mismo que sucedió con los integrantes de Unión Patriótica, grupo político que padeció el asesinato de 5.000 de sus miembros. A lo que se suma, las curules en Cámara y Senado, condiciones similares que se han dado en otros acuerdos”, anotó el investigador en conflictos.
Respecto al plebiscito, el diputado Nicolás Aguilar, del Centro Democrático, manifestó que esta consulta no es bipartidista, es decir, no se decidirá por el presidente Juan Manuel Santos o el senador Álvaro Uribe.
“Ni tampoco estaremos votando por la paz, porque si fuese así, no habría resistencia entre un sector de los colombianos. Realmente vamos a decidir por un acuerdo que no fue claro desde un principio, en otras palabras, deberíamos estar debatiendo esos acuerdos y no su aprobación”, manifestó el diputado caldense.
El mecanismo de consulta servirá, de ganar el sí, para refrendar los acuerdos consolidados por el Gobierno y las FARC, pactados durante los cuatro años de diálogos celebrados en La Habana (Cuba); por el contrario, si sale victorioso el no, no se aplicarían.
Según la Corte Constitucional, el próximo 2 de octubre se necesitarán 4.4 millones de votos para avalar la decisión que tomen los colombianos, sea por el sí o por el no, lo que equivale a un umbral del 13 %.