A partir de sus raíces, mutilaciones y puntas, especies como acacia, ceiba y manglares son retratadas para entablar una relación visual con la situación que vive una familia o un ser humano cuando es despojado de su territorio, violentado físicamente y desplazado de su entorno habitual.

Los detalles de este montaje artístico podrán ser apreciados por el público que asista a la exposición “Vacío genealógico”, ubicada en el cuarto piso de la Torre de Estancia de la Universidad Nacional de Colombia (U.N.) Sede Manizales.

La obra del artista español Abel Jiménez, egresado de la Facultad de Bellas Artes de la Universidad de Barcelona, recurre a la metáfora visual para relacionar los vacíos que genera el conflicto, mediante la materialización del concepto a través de una serie de fotografías de árboles.

“Mi trabajo con la naturaleza suelo asociarlo, por ejemplo, a un árbol al que, como a alguna persona o núcleo familiar, le cercenan una parte de sí mismo, pero las raíces todavía lo sostienen, teniendo que cargar con vacíos el resto de su vida”, precisó el artista catalán, residenciado en Cali.

El joven, quien llegó al país a través de una estancia universitaria, emplea un juego visual con los árboles, que por su variedad, también los relaciona con la tipología diversa de las familias colombianas.

“Cada especie es diferente, al menos en la apariencia o estética, por lo tanto, los efectos violentos sobre ellos se ven reflejados de varias maneras, tal como lo viven las familias que han padecido el conflicto”, comentó el artista Jiménez.

Asimismo, a través de una escultura, cuyo cuerpo fue elaborado en icopor rígido, sostenido en los extremos por dos estructuras de madera, el artista interpreta el vacío a partir del diálogo entre dos materiales totalmente diferentes.

Para el exponente, el icopor es fácil de rasgar, difícil de desintegrar, y además, contaminante. Su relación con la memoria se da justamente por esas cualidades.

“Por mucho que rasguemos en los recuerdos, particularmente en la memoria, siempre quedarán minucias, es decir, el icopor es un material de difícil degradación, por lo que, en el ambiente quedarán partículas. Mientras que la madera, material de origen natural, es el contenedor, la base”, argumentó el artista.

Otras ciudades, como Bucaramanga y Cali, sirvieron de epicentro para exponer un performance y fotografías del español.

El Festival Internacional de Arte Contemporáneo pretende generar espacios urbanos que sirvan para exponer el trabajo de artistas locales, nacionales e internacionales, sumando diversos enfoques estéticos.

La exposición hace parte del Primer Festival Internacional de Arte Contemporáneo que organiza la Universidad de Caldas, y en el cual participa la U.N. con la concertación de un espacio abierto a todo público, tanto interno como externo.

Germán Augusto Cano Restrepo, director de Divulgación Cultural de la U.N., informó que la exposición estará abierta al público hasta el próximo 12 de octubre.