Para determinar cuántos son, qué expectativas tienen, cómo se componen sus familias y cuál es su nivel de escolaridad, entre otros aspectos, se formularán encuestas que proporcionen cifras ciertas.

Así se refirió el rector de Universidad Nacional de Colombia (U.N.), profesor Ignacio Mantilla, al proceso que adelantará la Institución para caracterizar a la población que se reincorporará a la vida civil después de que se firme el Acuerdo de Paz entre el Gobierno nacional y las Farc.

En su visita a la U.N. Sede Manizales, el directivo recordó que en la página 66 del acuerdo original se delega a la Universidad la tarea de realizar el censo para caracterizar a la población.

Como tal, uno de los pasos a seguir en el posconflicto –después del acto que se llevó a cabo este jueves en el Teatro Coló de Bogotá– es conocer a los hombres y mujeres que retornarán a los cascos urbanos luego de vivir muchos años entre las montañas al servicio del grupo insurgente que decidió dejar las armas.

“Teníamos que esperar a que se firmara el Acuerdo, justamente esta semana nos sentaremos con los profesores del Centro de Pensamiento y Seguimiento al Diálogo de Paz, bajo la coordinación del profesor Alejo Vargas, para formular el proyecto del censo, que es una tarea esencial”, indicó el profesor Mantilla.

Al tiempo que asumió esta tarea como una responsabilidad muy grande, el Rector anotó que la información que se recopile por medio de las encuestas permitirá saber a qué aspiran los ex combatientes en términos académicos, es decir si quieren ser profesionales, técnicos o bachilleres.

“Eso nos lo dirá el censo. Finalmente, esta es una labor encomendada a la U.N. por la confianza que despierta en el Gobierno nacional y en la guerrilla”, sostuvo el Rector de la U.N.

Comprometidos con el proceso

Desde que se iniciaron los diálogos de paz, la U.N. estuvo presente coordinando con Naciones Unidas los seis foros que se realizaron para compilar todos los documentos que después se enviaron a La Habana y fueron la base del estudio para llegar al Acuerdo inicial.

Así mismo, con la ONU y la Conferencia Episcopal Colombiana se seleccionaron los 60 representantes de los más de seis millones de víctimas, que estuvieron en La Habana.

“Tenemos un centro de pensamiento y seguimiento al proceso de paz que ha sido muy activo y reconocido; además, la U.N. ofreció su emblemático auditorio León de Greiff para firmar el Acuerdo de Paz, pero no se dio por razones que todos conocen”, precisó el directivo.

El Rector recordó que, además, la U.N. quiere participar en la tarea pedagógica sobre lo que significa un acuerdo de paz, por lo que constituyó el Instituto Colombo-Alemán para Estudios de Paz, financiado por la Cancillería de Alemania y cuatro universidades de ese país, junto con las instituciones que forman parte de la Alianza por la Paz en Colombia. El propósito es ofrecer estudios de maestría y doctorado con profesores alemanes y colombianos y financiados por el Servicio Alemán de Intercambio Académico, en temas de paz, posconflicto, derecho, justicia y víctimas.