El sistema eléctrico de la sombrilla, que se carga a partir de las placas solares, cuenta además con una batería de bajo voltaje para abastecer energéticamente la instalación de luz eléctrica de bajo consumo con bombillos tipo LED.

La sombrilla diseñada funcionalmente a escala, por un grupo de estudiantes de los programas de Ingeniería Eléctrica y Electrónica de la Universidad Nacional de Colombia (U.N.) Sede Manizales, se alimenta de la radiación solar.

La idea, que materializaron Hellman Imbachi, Moisés Barón y Reagan Muñoz,  produce la energía eléctrica necesaria para cargar un teléfono móvil, una cámara fotográfica o cualquier otro aparato o dispositivo similar, que no sea de excesivo consumo.

El prototipo fotovoltaico incorpora una pluralidad de placas solares que, con el correspondiente y clásico circuito, alimentan una base de enchufe o conector que, a su vez, suministra energía eléctrica.

“Estamos hablando de aparatos como celulares, tabletas, entre otros, que requieran de al menos cinco voltios y poca energía eléctrica para su funcionamiento”, anotaron los universitarios.

El diseño del prototipo se sustentó en materiales como cartón, piedra, cables, bombillos LED, paneles, baterías, regulador, entre otros.

“La base principal para comenzar a trabajar nuestro proyecto fue la necesidad de identificar el acceso a fuentes de energía con el fin de cargar dispositivos móviles en espacios al aire libre, pues en escenarios urbanos existen muy pocas”, indicó Imbachi.

Por ello, trajeron a colación las iniciativas que actualmente reinan en la producción de energía renovable y que recurren a fuentes naturales como el viento, el sol, los ríos o mares.

Modelo funcional

“La energía captada desde los módulos solares pasa a un regulador de carga y de ahí al banco de baterías. El sistema produce cinco voltios de corriente continua para consumir en los dispositivos electrónicos”, explicaron los estudiantes.

El cableado, así como otros accesorios del circuito eléctrico, están implantados en el interior del mástil hueco de la sombrilla, incorporándole a la vez, de forma fija o no, un enchufe a través del cual se puede alimentar eléctricamente cualquier aparato.

“Entre más grande sea el sistema, mayor será la producción de energía, es decir, si se cuenta con más paneles se obtendría el recurso necesario para abastecer más dispositivos a la vez”, indicaron los diseñadores de la propuesta de energía alternativa.

Los jóvenes no descartaron la posibilidad de aplicar el modelo en las sombrillas ubicadas en el campus La Nubia, aprovechando la radiación solar que llega hasta ellas.

Justamente, en ese campus de la U.N., se puso en funcionamiento, a comienzos de año, el primer módulo o Punto Verde, para recargar celulares a través del sistema fotovoltaico que trabaja a partir de un dispositivo, compuesto por un panel solar capaz de generar 100 vatios (en su máximo pico), acompañado de una batería de almacenamiento y un inversor.

El sistema, diseñado y construido por el grupo E3P, adscrito a Colciencias y dirigido por el docente Camilo Younez, comenzó a ventilarse desde el 2014.